Cirugia de la obesidad

Los pacientes obesos "añoran" alcanzar una reducción importante de peso. La mayoría llega a mi consultorio con la gran expectativa de encontrar la solución inmediata en una cirugía que se programe a mínimo plazo. Ya han probado los mil y un modos de perder peso y han pasado por las mil y una desilusiones. Estos fracasos hacen que estos pacientes sean especiales. Todos y cada uno de los que he atendido han sido particulares. El unico denominador es la gordura. La obesidad sobrellevada durante toda una vida. Nadie se imagina las vivencias de situaciones que desconoce. Cada uno de ellos ha tenido vivencias diferentes, muchas de ellas crueles o injustas. En la consulta debo tratar de escuchar cuales son sus expectativas, sus miedos, sus posibilidades, su proyección. Luego de anotar los datos de rigor, antropométricos, etc. ya se me ha transferido a mi entender la responsabilidad de decidir, definir y aconsejar los posibles tratamientos. Todo esto debe ser realizado en no más de 1 hora y tratando de no aumentar la demora. Una situación que para el que espera afuera del consultorio constituye una espera más y para mí y mi paciente, una decisión crucial. El paciente obeso espera lo mejor de mí, una decisión segura, humana, profesional, un tratamiento que le resulte accesible, posible, factible. Y efectivo. Necesita reducir peso. Su vida y la de sus familiares está en juego. ¡Que momento!
No es fácil esto, pero les puedo segurar que es inmensamente gratificante sentir cuando se adopta la decisión y consejo oportuno, y que el tratamiento funciona.